(Al llegar al apartamento 109 del complejo de edificios "Blue Creek Apartments", vemos a la mujer del cementerio recostada en el suelo, frente a un enorme espejo, sostenido un cuchillo)
Angela: - Oh... es usted.
James: - Sí, soy James.
James: - Sí, soy James.
A: -Mmmh... Angela.
J: - Angela. De acuerdo.
No sé en que esté pensando
No sé en que esté pensando
pero siempre hay alternativas.
A: - ¿De verdad?
Pero... usted es como yo.
Es más fácil sólo correr.
Además, es lo que nos merecemos.
J: - No, no soy como usted.
A: - ¿Está asustado?
Yo.... eh... lo siento.
J: - No hay problema. ¿Encontró a su madre?
A: - Todavía no... no está en ninguna parte.
J: - ¿Vivía su madre en este edifico de apartamentos?
A: - No lo sé...
J: - ¿Entonces, todo lo que sabe es que ella vivía en este pueblo?
A: - ¿Qué ha dicho?
(Se voltea hacia James)
¿Cómo lo sabe?
J: - Bueno...
Me lo imaginé porque es aquí donde la está buscando.
¡¿Cómo podía saberlo?!
A: - Si...
J: - ¿Estoy en lo cierto?
A: - Estoy tan cansada...
J: -De todas formas, ¿por qué vino a esta ciudad?
A: - Lo, lo siento.
¿Ha encontrado a la persona que busca?
J: - Aún no.
(Saca de su bolsillo una fotografía)
Se llama Mary, y es mi esposa.
A: - Lo siento.
J: - No hay problema.
De todas formas ella está muerta.
No sé porque creo que ella está aquí.
A: - ¿Está muerta?
J: - No se preocupe, no estoy loco.
Por lo menos no creo estarlo...
A:- Debo encontrar a mi mamá...
J: - ¿Quiere que la acompañe?
Este pueblo es peligroso.
Ahora sé lo que quiso decir en el cementerio.
A: - Me las arreglaré sola.
Además, le haría perder el tiempo.
J: -¿Qué me dice de eso?
(Señalando el cuchillo)
A: -¿Me lo guardaría?
J: - Claro, no hay problema.
A:- Si me lo quedo yo...
no sé que podría hacer.
(James lo va a recibir, pero Angela grita y se lo pone frente a él como si quisiera atacarlo)
A:- ¡¡¡NOOO!!!
Lo siento... he sido mala... ¡por favor, no!
(Angela deja el cuchillo sobre una mesa, y se marcha llorando)
A: - ¿De verdad?
Pero... usted es como yo.
Es más fácil sólo correr.
Además, es lo que nos merecemos.
J: - No, no soy como usted.
A: - ¿Está asustado?
Yo.... eh... lo siento.
J: - No hay problema. ¿Encontró a su madre?
A: - Todavía no... no está en ninguna parte.
J: - ¿Vivía su madre en este edifico de apartamentos?
A: - No lo sé...
J: - ¿Entonces, todo lo que sabe es que ella vivía en este pueblo?
A: - ¿Qué ha dicho?
(Se voltea hacia James)
¿Cómo lo sabe?
J: - Bueno...
Me lo imaginé porque es aquí donde la está buscando.
¡¿Cómo podía saberlo?!
A: - Si...
J: - ¿Estoy en lo cierto?
A: - Estoy tan cansada...
J: -De todas formas, ¿por qué vino a esta ciudad?
A: - Lo, lo siento.
¿Ha encontrado a la persona que busca?
J: - Aún no.
(Saca de su bolsillo una fotografía)
Se llama Mary, y es mi esposa.
A: - Lo siento.
J: - No hay problema.
De todas formas ella está muerta.
No sé porque creo que ella está aquí.
A: - ¿Está muerta?
J: - No se preocupe, no estoy loco.
Por lo menos no creo estarlo...
A:- Debo encontrar a mi mamá...
J: - ¿Quiere que la acompañe?
Este pueblo es peligroso.
Ahora sé lo que quiso decir en el cementerio.
A: - Me las arreglaré sola.
Además, le haría perder el tiempo.
J: -¿Qué me dice de eso?
(Señalando el cuchillo)
A: -¿Me lo guardaría?
J: - Claro, no hay problema.
A:- Si me lo quedo yo...
no sé que podría hacer.
(James lo va a recibir, pero Angela grita y se lo pone frente a él como si quisiera atacarlo)
A:- ¡¡¡NOOO!!!
Lo siento... he sido mala... ¡por favor, no!
(Angela deja el cuchillo sobre una mesa, y se marcha llorando)
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